Muchos grandes grupos ecologistas, como Birdlife, Greenpeace, WWF y Amigos de la Tierra han apoyado a las energías renovables y a la energía eólica.
El cambio climático era la mayor amenaza para las aves y el viento y la obtención de energía de fuentes naturales y renovables son una solución para evitar el cambio climático.
Los parques eólicos están sujetos a evaluaciones de impacto ambiental antes de ser construidas, para de esta manera garantizar que no afectará en el entorno inmediato, incluyendo la fauna y la flora.
Los aerogeneradores son los culpables de una mínima porción de la muerte de aves por colisiones o por objetos creados por el ser humano.
En el 2012, en Reino Unido, fue llevado a cabo un estudio realizado por Pearce-Higgins et al.
En este estudio llegaron a la conclusión de que la gran mayoría de especies pueden coexistir y prosperar con los parques eólicos, incluso cuando estos están plenamente operativos.
Según otro estudio realizado por Green Blue Energy, teniendo en cuenta todas las estructuras actuales que hay en alta mar y las tasas de mortalidad para diferentes especies de aves, cubren un rango de 0,01 a 23 muertes por año.
Se ha calculado que, en los Estados Unidos, las turbinas de viento provocan la muerte de entre un 0,01 a 0,02% de las aves que fallecen por colisiones con objetos creados por el hombre en un año natural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario